Con el cambio monetario iniciado en Cuba el pasado enero del presente año la isla se encuentra de patas arriba como dice el dicho con los precios exorbitantes. Los cubanos se enfrentan a diario a la subida de precios estipulada por el Gobierno y la inflación.
Es una verdad que el país se encuentra desabastecido de muchos productos de primera necesidad debido a la crisis económica a causa del bloqueo económico impuesto por los Estados Unidos y por el azote de la actual pandemia de la COVID-19 que afecta a nivel mundial.
Cada día los cubanos se quejan de las cifras incosteables para las familias cubanas promedio que adquieren dichos productos cuando aparecen en el mercado negro. Junto a la subida de precio de dichos productos está el incremento en las tarifas de los servicios básicos (electricidad, gas, agua, e incluso la libreta de abastecimiento), han convertido la supervivencia diaria en un verdadero reto.
En la isla hay muchas personas que no están contentas con el cambio monetario pues a pesar de que los salarios subieron no alcanzan pues con el desabastecimiento y la escasez han disparado los precios de todo. El cartón de huevos está oscilando entre los 250 y los 400 CUP, igual que con la libra de leche en polvo, y la carne de puerco está a 100 la libra.
Alexander Pupo, doctor residente en Holguín, explica que, aunque el sector de la salud ha sido beneficiado con un nuevo aumento salarial, continúan bajo pésimas condiciones económicas. Cuenta que de un 50 a un 70% de su salario mensual se gasta en alimentos solamente y un 10 o 20% más se va en electricidad, y el resto de dinero se va en cosas que se rompen o en la balita de gas extra que se consigue ilegal (para aquellos que no tengan servicios de gas manufacturado.
