La Unión Cuba-Petróleo (Cupet) anunció este domingo que la Refinería Ñico López, ubicada en el municipio de Regla, comenzó a refinar crudo, después de un año sin ejecutar estas operaciones, lo que explica el fuerte olor a gas que se siente en varias zonas de La Habana.
En estos momentos, explica Cupet, la refinería opera de manera estable, sin dificultades técnicas y con un control permanente del funcionamiento de los sistemas tecnológicos, vinculados con la quema en la antorcha, con el objetivo de minimizar estos efectos desagradables.
Agrega que el Centro de Investigación del Petróleo de Cuba, en contacto directo con la Empresa de Gas Manufacturado y la máxima dirección de la Unión Cuba-Petróleo, mantienen dos grupos de trabajo activos y en constante intercambio con la población e instituciones.
Estos organismos realizan mediciones de calidad del aire en las zonas afectadas para, de ser necesario, actualizar estrategias e informaciones al pueblo, siempre oportunas y veraces, precisa la empresa.
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