El Gobierno de La Habana, comenzará a aplicar medidas fiscales a los pasajeros que arriben a Cuba, y no cumplan con el aislamiento preventivo de 5 días establecidos dentro de los protocolos de seguridad establecidos por el estado para contener el contagio y propagación de la pandemia del coronavirus y que está siendo generalmente violado por los cubanos residentes en el extranjero que no tardan en visitar a familia y amistades.
Austeras y drásticas serán las sanciones que se extenderán además a los propietarios de las viviendas donde se alojan y familiares y amigos del que llega, que irresponsablemente mantengan contacto con el viajero.
En el día de ayer según dio a conocer el periódico estatal de La Habana, Tribuna, tras reportarse un nuevo récord de contagios en un día en Cuba, y conocerse por parte de las autoridades médicas de la capital, que todos o un gran porcentaje de los viajeros que llegan a Cuba, permiten visitas o realizan visitas antes de los 5 días después de su arribo o salen de sus hogares antes de recibir el resultado del segundo PCR, se desarrolló la comparecencia del Consejo de Defensa Provincial (CDP) de La Habana para debatir y aprobar dichas normas.
El medio de prensa citó además que las autoridades cubanas cuentan con “herramientas legales para aplicar a los indisciplinados”, y que las leyes nacionales avalan lo concebido por el CDP. Los viajeros que incumplan con las normas serán juzgados por el delito de ‘propagación de epidemias’.
Luis Antonio Torres Iríbar, presidente del CDP de la Habana, y Reinaldo García Zapata, el vicepresidente, incitaron a entender al hogar como un centro de aislamiento, por lo que es necesario el cumplimiento estricto de las medidas de seguridad.
Una de las medidas adoptadas en los primeros meses de pandemia en el territorio capitalino, que puso en vigor el decreto para la imposición de multas de hasta 3000 CUP por violar los protocolos sanitarios decretados, es un referente de la efectividad de estas leyes.
Varias provincias como La Habana, Matanzas, Villa Clara, Santiago de Cuba y Guantánamo han retrocedido de las fases de recuperación o normalidad en que se encontraban, debido a la dificilísima situación epidemiológica que registran en el último mes. Tanto la población como las autoridades están ampliamente abrumadas ante una situación que solo va declinando.