Luego de haber incluido a Cuba, en la lista de países de riesgo por la COVID-19, a partir del 1 de febrero, España exigirá una prueba PCR negativa a viajeros procedentes de la isla que quieran ingresar a su territorio. De acuerdo al último Boletín Oficial del Estado (BOE), la medida se extenderá solo por una semana, es decir, hasta el 7 de febrero.
Para la restricción de los países incluidos en la lista se tuvo en cuenta aquellos que acumulan una incidencia mayor a 150 por 100,000 habitantes en 14 días. Además de mayor de las Antillas, otros países de América Latina que aparecen en la actualización son Chile, Colombia, Argentina, Bolivia, Belice, Costa Rica, Ecuador, entre otros.
También se exigirá dicha prueba a viajeros que vayan desde Estados Unidos y Canadá.
Desde el pasado 10 de enero, y ante la oleada de rebrote y propagación del coronavirus que se evidencia por el número de contagiados reportados diariamente por el Ministerio de Salud pública, el régimen cubano anunció como requisito obligatorio, el resultado negativo de PCR a todos los que deseen visitar la isla.
Al cierre de este lunes 25 de enero, Cuba, volvió a registrar un récord de positivos diarios, con 786 nuevos casos de coronavirus, para un acumulado de 22 614 contagiados. A causa de la enfermedad fallecieron otros tres pacientes, que incluye la muerte de un hombre de 32 años, la persona más joven que ha fallecido por COVID-19 en la isla. El país acumula 200 muertes por esta causa.
«Tres familias se enlutan, tres colectivos se afectan. Transmitimos nuestras condolencias a los familiares. Es duro cuando se tiene que informar por varios días consecutivos sobre fallecidos, tres casos, dos casos, un día cinco», lamentó en su conferencia matutina el director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública de Cuba (Minsap), Francisco Durán.
El gobierno cubano ha intensificado las medidas restrictivas, la mascarilla es de uso obligatorio, la prueba PCR negativa que deben presentar los viajeros internacionales debe haber sido realizada 72 horas antes de su arribo al territorio nacional, una vez en el aeropuerto se le toma una nueva muestra debiendo mantener un estricto aislamiento hasta que se le informe el resultado de la misma.