A partir de este domingo 23 de mayo, en la provincia de Santiago de Cuba, quedan establecidas estrictitas de confinamiento, similares a las que fueron adoptadas en todo el país cuando se produjo el primer brote de la pandemia de la COVID-19.
El Consejo de Defensa de este territorio oriental, ante la agravante situación epidemiológica determinó adoptar nuevas medidas que minimicen los “riesgos de salud” que corren los habitantes de esta urbe. Una nota publicada por el diario oficialista Sierra Maestra, firmada por Lázaro Expósito Canto, primer secretario de Partido Comunista en Santiago de Cuba, aborda el fallecimiento de cinco personas en este territorio, y 17 pacientes contagiados ingresados en las salas de terapia intensiva y enfatiza:
“Estamos en inminente peligro, la agresividad del virus se ha incrementado y la irresponsabilidad social favorece el aumento del contagio, en la provincia se están diagnosticado más de 100 casos diarios, lo que demuestra el incumplimiento de los protocolos sanitarios; las medidas establecidas garantizan la protección, cumplirlas es de carácter obligatorio, por lo que se exigirá con rigor por su total observancia”, indica la nota oficial.
Entre las nuevas medidas restrictivas se establece que, el servicio de transporte público solo funcionará de 5:00am a 8:00 am, y de 4:00 pm a 7:00 pm, “para garantizar el traslado del personal de salud y otros servicios esenciales”.
Cada persona “deberá permanecer en su vivienda y garantizar la protección de menores y vulnerables, sólo se puede salir a lo estrictamente necesario”.
“Los órganos competentes, organizaciones políticas y de masas velarán por el cumplimiento de lo indicado; las personas que sean detectadas violando lo establecido responderán de acuerdo a la legislación vigente”, amplía el contenido.
En la reunión del Grupo de Trabajo Temporal para el Enfrentamiento al Covid-19 el presidente Miguel Díaz-Canel señaló que “en Santiago de Cuba no se trabaja con planificación, orden y control, lo que favorece la improvisación en la toma de decisiones”.
Por su parte, José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, criticó a las autoridades sanitarias “por disminuir la percepción del riesgo, violar los protocolos, fallar en el control de los focos y los errores en la organización de la pesquisa”.