Esta vez fue desde la puerta, justo cuando me asomaba para despedir el sol. “La guapa”, pero del otro lado, no estaba muy bien de ánimo. Sí, vivo literalmente rodeado de “guapas”.
Como quien no quiere las cosas, me acerqué. Al ver su mirada empañada, le pregunté qué la apenaba. Me miró y regaló una sonrisa, así como agradeciendo mi preocupación. ¡Oye qué fácil! Cubanito al fin, conversamos de todo y de nada. Terminé por decirle que, si en otra ocasión se sentía fatal, nos leyera a cada rato en Todo Cuba Online. Pon “esfuercito”, le indiqué.
Y es que “la guapa del otro lado” ignora que cosas malas también les ocurren a buenas personas. Simplemente pasan. Muchas veces nos pillan con la guardia baja. El quid es mantenerse en calma y no hacer ningún mal a nadie para evitar conflictos.
Así que, si eres “cubaniche”, debes tener en cuenta ciertos tips para tu vida. En este sentido, una autoimagen saludable resulta cardinal. Por lo tanto, no hay que dar tanta importancia a lo que el resto diga o piense de ti. ¡Miren que el cubano habla! Es necesario establecer diálogo con nosotros mismos y preguntarnos si estamos bien en el interior.
¡Ah! Criticar la apariencia de alguien hace mucho daño en ocasiones. ¡Sale a una fiesta en Cuba! Somos de los que creemos que nadie está hecho para odiar y ser odiado, al contrario, para amar y ser amado. En eso los cubanos, también somos expertos.
Nunca dejemos que nadie nos defina. El éxito no radica en agradar e impresionar a todos, sino en establecer tus propias metas, objetivos y alcanzarlos a su debido tiempo. Soñar con el futuro es saludable.
“La guapa del otro lado” debe comprender que la lucha de la vida es útil para crecer como humanos, ser más fuertes y sabios. Por lo tanto, hacer de nuestros defectos una gran fuerza, es esencial para recorrer el largo camino de la existencia.
Por fin, el sol se despedía. Creo que “la guapa del otro lado” hizo suyas mis palabras. Se fue con otra sonrisa y dejándome claro que elegir la felicidad y el agradecimiento, es el verdadero camino.