Esperanzados los cubanos, siguen las noticias sobre el avance de los ensayos clínicos de los candidatos vacunales que desarrollan científicos cubanos. No obstante, el proceso demanda de tiempo para cumplir con pasos que no se pueden violar para garantizar la validez y seguridad del producto.
La compleja situación epidemiológica por la Covid-19, imperante en Cuba, desde hace ya un año ha conllevado a que investigadores de la isla, se encuentren desarrollando cinco vacunas propias contra la enfermedad, por lo que cada noticia al respecto resulta un aliento para la población y el personal de salud; así como un incentivo para los científicos que se esfuerzan enormemente en obtener la fórmula contra el virus en el menor tiempo posible.
El candidato más adelantado es Soberana 02, el único de Latinoamérica en fase III de ensayos clínicos, que desde hace una semana está en etapa final del estudio que incluye a 44 mil voluntarios de entre 19 y 80 años de edad, cuyos resultados hasta el momento son satisfactorios. La fase I comenzó en octubre de 2020, en diciembre se pasó a la II y, tras obtener y demostrar buenos resultados de inmunogenicidad, el pasado 3 de marzo fue autorizado para avanzar a la fase III.
Una información reciente de las autoridades del Grupo de las Industrias Biotecnológica y Farmacéutica de Cuba (BioCubafarma) asegura que se cumple estrictamente el protocolo establecido y las buenas prácticas clínicas. En la primera semana de avance y ajuste de los procesos de la tercera fase que cierra con cuatro mil 478 vacunados, se han presentado eventos adversos leves solo en algunos sujetos del ensayo, los síntomas han sido dolor leve en el sitio de la inyección en las primeras 24 horas de administrado el fármaco y malestar general.
El doctor Vicente Vérez, director del Instituto Finlay de Vacunas (IFV), institución líder de este proyecto, informó a finales del año pasado, que la última etapa de estudio de Soberana 02 estaba prevista realizarse también en el extranjero en colaboración con otras naciones en el desarrollo de vacunas.
Recientemente se conoció que esta fase se complementa en Irán, con unas 100 mil dosis enviadas al Instituto Pasteur de ese país, en el cual de confirmarse los resultados finales de eficacia, se pondrán también en marcha la producción masiva de este producto según anunció el portavoz de la Organización para Alimentos y Medicinas de la nación persa, Kianush Yahanpur.
En entrevista con el medio peruano Exitosa Noticias, el doctor Vérez estimó que la producción masiva de Soberana 02 está prevista aproximadamente para julio, y la de Soberana 01, otra de las propuestas del IFV, avanza rápidamente a la fase III y en agosto podría estar disponible comercialmente.
En la provincia de Santiago de Cuba, se iniciará también la fase III de estudios del candidato Abdala (CIGB 66), del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, tras la aprobación de la entidad reguladora de medicamentos. Unos 30 mil habitantes del municipio cabecera, pertenecientes a 14 policlínicos, participarán en esta última etapa.
Cuba, trabaja en otras dos formulaciones contra el virus SARS-CoV-2, Soberana Plus, también del IFV, y Mambisa, del CIGB, esta última se aplicará de forma nasal. El doctor en Ciencias Eduardo Martínez, presidente de BioCubaFarma aseguró a la prensa que equivalente a estos estudios se continúa la producción a escala industrial de esos inyectables.
Por su parte, el director del Centro de Inmunología Molecular, Eduardo Ojito detalló que la industria biofarmacéutica cubana tiene capacidad tecnológica disponible para producir millones de dosis mensuales, o sea más de 100 mil bulbos diarios, con volúmenes de llenado de 12 mil frascos por hora en cada laboratorio.
Antes de culminar el presente año Cuba, espera llegar a producir 100 millones de dosis lo que permitiría inmunizar a más de 11,2 millones de cubanos, además de extranjeros interesados en el producto, según afirman los especialistas.