El juego entre los equipos de Matanzas y Las Tunas, que definió el pase a la final de la Serie Nacional del Béisbol de Cuba, “se puso caliente” como dicen los cubanos, por una pelea entre jugadores de ambos equipos. Encuentro en el que resultó ganador el equipo de los Cocodrilos, actual campeón de la 59 Serie Nacional.
Cuando discutían el octavo inning, con un marcador de dos outs, se provoca un altercado entre el corredor tunero Héctor Castillo que se tiró en la segunda base buscando romper un out forzado, y golpeó con sus spikes al defensor matancero, Aníbal Medina.
De inmediato los jugadores salieron de las bancas y ambos conjuntos protagonizaron una gigantesca bronca, que incluyó varios empujones y cruce directo de puñetazos, especialmente entre Larduet y el matancero Yadir Dreke.
La reacción inmediata de los árbitros conllevó a expulsar a los principales responsables de la pelea. En total, cinco jugadores fueron expulsados, tres de Las Tunas y dos de Matanzas, este último a pesar del triunfo resulta un gran revés no poder contar en el primer juego de la gran final con dos de sus mejores jugadores, Yadir Dreke y Yoel Suárez.
El equipo de Matanzas, logró ganar la semifinal del campeonato cubano de pelota después de vencer en cuatro partidos consecutivos y revertir el resultado de los dos primeros juegos ante Las Tunas, con dos derrotas seguidas.
