Para este verano las autoridades cubanas han determinado que los vehículos privados incluidos en la categoría D (camión, micro y ómnibus) para realizar viajes a zonas de playa deberán contar con una autorización de la dirección de transporte de la provincia a la que pertenezcan.
Los medios de transporte citados, para el traslado masivo de personas a las playas durante los próximos meses, deberán portar el documento «permiso de verano».
Otra de las medidas adoptadas por la Comisión de Seguridad Vial (CNSV), será activar puntos de control de alcoholemia que mantendrán los chequeos desde el atardecer y al anochecer. También en los parqueos, se realizarán reconocimientos antes de la salida de los vehículos.
Entre otras, estas regulaciones de obligatorio cumplimiento contribuirán a prevenir accidentes de tránsito que según las estadísticas se han incrementado en Cuba en los últimos períodos, por lo que se hace necesario extremar las precauciones durante este período cuando se produce un aumento de traslados de personas a estos lugares recreativos.
En declaraciones al medio oficialista Granma, Reynaldo Becerra Acosta, secretario general de la CNSV, aseguró que agentes de policía e inspectores controlarán los medios de transportación masiva, sobre todo en los puntos de embarques y terminales de ómnibus en horarios nocturnos.
En todos los territorios se reforzará la vigilancia y el patrullaje en las vías, con acciones que incluyan además el enfrentamiento a las indisciplinas de los peatones y los vehículos de tracción animal, aunque, por ser la capital, La Habana, la provincia con más propuestas para la recreación y con peores índices de accidentalidad en lo que va de año, las autoridades reforzarán los controles de alcoholemia durante el verano.
Además, comunicó Becerra, de los puntos de controles de alcoholemia, la revisión técnica de los vehículos, la vigilancia y el control en las vías de acceso hacia los lugares de mayor afluencia de público, se exigirá por el uso del casco y el cinturón de seguridad.