Ante las sanciones dictadas este miércoles pasado, por el gobierno de Donald Trump, a Fincimex y otras 6 entidades cubanas, numerosos habitantes de la isla podrían verse afectados económicamente ya que a través de las remesas tienen su principal fuente de sustento.
Fincimex, desde hace varios años es la encargada de “gestionar y procesar las remesas a Cuba” por lo que funciona como contraparte de la Western Union (WU), la principal vía adoptada por los cubanos residentes en los Estados Unidos para enviar dinero a sus familiares en la isla.
Hasta el próximo 12 de junio, fecha en que se oficializa las nuevas regulaciones, por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, los cubanos no tienen claro cuáles serían las afectaciones del contrato entre las dos identidades para gestionar las remesas. Evidentemente no solo se vería afectado el pueblo, sino también la economía del país ya que es una de las principales vías del gobierno cubano para captar divisas frescas, sobre todo en los momentos actuales, cuando se han visto seriamente limitadas actividades económicas esenciales como la explotación turística y la exportación de servicios médicos al exterior.
