El Gobierno cubano aprobó un grupo de medidas para enfrentar el desvío de combustible al mercado negro, un prolongado problema que cuesta millones a las arcas estatales y agravado en los últimos años por la reducción de los envíos a la isla de petróleo subsidiado desde Venezuela.
El ministro cubano de Energía y Minas, Raúl García, avanzó en la reunión que «se elaborarán de inmediato las normas jurídicas que permitan» aplicar las nuevas medidas y agregó que el problema se analizará cada mes en los consejos de dirección de todas las entidades estatales
La decisión la publicó hoy el diario estatal Granma dentro de una amplia nota sobre los asuntos abordados en el más reciente Consejo de Ministros encabezado por el presidente del país, Miguel Díaz-Canel, quien instó a «defender entre todos» un asunto en el que «resulta fundamental el control».