Opositores que promueve cambios en la Isla por vías legales pidieron el miércoles que se aproveche la reforma constitucional en marcha para permitir la existencia de nuevas organizaciones políticas más allá del Partido Comunista, reporta la AFP.
«Estamos buscando una apertura al pluralismo de la política en Cuba, que los que quieran inscribir partidos puedan inscribirlos, que los ciudadanos puedan participar, pero sobre todo que se establezca la igualdad ante la ley», dijo a la prensa Manuel Cuesta Morúa, integrante de la opositora Mesa de Unidad de Acción Democrática.
La Asamblea Nacional prepara una reforma de la Constitución que, según el Gobierno, luego será sometida a referendo. La comisión a cargo está encabezada por Raúl Castro, de 87 años, primer secretario del Partido Comunista.
Es improbable que la reforma incluya cambios como los que piden los disidentes. Más bien la presencia de Raúl Castro parece dirigida a intentar blindar el futuro del sistema.
«Los ciudadanos debemos tener la capacidad de proponer, no solo de ser consultados. El Gobierno ha empezado al revés, en vez de consultar y abrir el proceso desde abajo, ha comenzado desde arriba», dijo Cuesta Morúa en una reunión convocada en una casa de La Habana Vieja.
La Constitución vigente establece en su Artículo 5 que el Partido Comunista es la «fuerza dirigente superior de la sociedad y del Estado». Para Cuesta Morúa, esta norma discrimina a otras preferencias ciudadanas y debe modificarse. Sin embargo, el gobierno ha dejado claro que la reforma constitucional mantendrá el control del PCC sobre el resto de los poderes del Estado.
Cuesta Morúa consideró que las eventuales nuevas agrupaciones que surgirían si el gobierno lo permitiera no deberían recibir financiamiento de la comunidad internacional porque eso podría ser interpretado como «una intromisión en el juego del poder al interior de un país y eso ataca la soberanía».
En lo que denominan Propuesta 2020, los opositores pidieron que la reforma incluya la posibilidad de elecciones directas de las autoridades. Actualmente la lista final de candidatos a la Asamblea Nacional pasa por una comisión de candidaturas que elabora una nómina cerrada, con el mismo número de candidatos para el mismo número de escaños.
La Asamblea Nacional supuestamente «elige» entre sus miembros al nuevo presidente, pero este también es propuesto por una comisión.
Raúl Castro reveló en la sesión en al que pasó la presidencia de los Consejos de Estado y de Ministros a Miguel Díaz-Canel, que su sustituto había sido preparado durante años para ocupar el puesto, lo que desmiente el carácter democrático que, defiende el gobierno, tiene el sistema cubano.
Con información de AFP