En la última semana, Cuba muestra un representativo aumento de los contagios por la COVID-19. El Ministerio de Turismo en su página en Facebook anunció este viernes 7 de agosto un número de medidas higiénico-sanitarias que debe cumplir el turismo nacional para frenar la propagación de esta enfermedad.
Cada turista presentará el resultado negativo del test rápido, que podrá realizarse en un período no mayor a las 48 horas antes del viaje. Para solicitarlo necesitará presentar en el policlínico la reserva de la instalación hotelera donde se hospedará el cliente. Además, hará una declaración de forma jurada en la que expondrá su estado de salud y, además, que no pertenece a una zona de riesgo o en cuarentena.
Para la provincia de la Habana, que retornó a la fase de transmisión autóctona limitada de la COVID-19, se realizará además de manera obligatoria la toma de temperatura a todos los turistas que, a través de las agencias de viaje, se trasladen hacia Varadero y otros destinos.
Los datos de los clientes que se reporten con síntomas febriles serán registrados por las autoridades de salud del territorio, para establecer la vigilancia clínico-epidemiológica correspondiente.
Desde el 18 de junio, se declaró el reinicio del turismo nacional en Cuba, las agencias Cubatur, Havanatur, Viajes Cubanacán, Ecotur, y Gaviota tour y los burós de ventas de Islazul y de Campismo iniciaron las reservaciones en todas las provincias, excepto en La Habana y en Matanzas, que a partir de ese día pasaron a la primera fase de la recuperación pos-COVID-19.