El inicio de las negociaciones entre Cuba y Estados Unidos para normalizar su relación está permitiendo que inversores extranjeros contemplen invertir en la isla caribeña según afirmó hoy el economista cubano Juan Triana.
Triana, profesor del Centro de Estudios de la Economía Cubana de la Universidad de La Habana (Cuba), también señaló que las empresas que actualmente están presentes en Cuba no debería estar preocupadas de la posible entrada futura de corporaciones estadounidenses en la economía de la isla.
Triana realizó estas declaraciones tras participar hoy en Toronto (Canadá) en un evento organizado por el Consejo Canadiense para las Américas (CCA) sobre la economía cubana y el papel de Canadá y Estados Unidos.
En el evento también participó el autor Peter Kornbluh, analista del Archivo de Seguridad Nacional de Estados Unidos y autor del libro «Back Channel to Cuba: The Hidden History of Negotiations Between Washington and Havana» sobre la historia de los fallidos intentos de normalización entre los dos países.
Kornbluh declaró a Efe que el presidente estadounidense, Barack Obama, ha imbuido un sentido de gran urgencia a las negociaciones con La Habana para evitar que su sucesor pueda echar marcha atrás a la normalización.
«Claramente estas negociaciones están siendo aceleradas», dijo Kornbluh.
«Estamos en un carrera para mejorar las relaciones como demuestra el envío de Roberta Jacobson, el apoyo a la idea de que el gobernador Mario Cuomo acuda a Cuba, tantear la posibilidad de que el secretario (John) Kerry vaya a La Habana a inaugurar la nueva embajada, y la reunión el próximo abril entre Obama y Raúl Castro en Panamá para la Cumbre de las Américas», continuó.
«A partir de esta semana, a Barack Obama le quedan dos años en la presidencia y quiere maximizar la iniciativa que ha tomado en asuntos exteriores, consolidarla para que no pueda ser revertida por quien quiera que sea el próximo presidente de los Estados Unidos», añadió.
Por su parte, Triana dijo a Efe que aunque lo acordado hasta el momento entre La Habana y Washington no ha eliminado el bloqueo económico por lo que las empresas estadounidenses todavía no pueden invertir en Cuba, el anuncio del pasado 17 de diciembre está teniendo ya profundas repercusiones económicas para la isla.
«Desde el 17-D, sin lugar a dudas, la imagen de Cuba ha cambiado. Hoy, muchas empresas importantes están mirando a Cuba. Cuando Cuba consiga por ejemplo que Estados Unidos le quite de la lista de países terroristas, el país cambia. Eso nos ha costado muchísimo a nosotros», afirmó.
Posteriormente Triana añadió que no ve «un gran impacto inmediato» por parte de dinero estadounidense llegando a Cuba.
«Sí tenemos la posibilidad de atraer mucha inversión de otros países. Y con estos cambios del 17-D, los inversionistas empiezan a mirar a Cuba de otra manera», explicó.
Kornbluh también dijo a Efe que uno de los posibles obstáculos futuros en las negociaciones entre Estados Unidos y Cuba sea la «burocracia» estadounidense y vinculó la dimisión del director de la agencia USAID, Rajiv Shah, con el anuncio del inicio de la normalización entre Washington y La Habana.
«Hay gente en la burocracia que tiene un interés personal en socavar cualquier cambio de la política hacia Cuba. Todas estas personas que están creando todos estos programas de cambio de régimen y democracia, es una red masiva de personas que se alimentan de estos programas y cuya fuente de ingresos dependen de estos programas. Son los que más resisten», explicó.
«Hay que destacar que el director de USAID dimitió un día antes del anuncio de Obama. Nadie sabe si dimitió porque está claro que todos estos programas de cambio de régimen tienen los días contados Pero muy poca gente ha prestado atención a que esto sucedió», concluyó.