Santiago de Cuba, ciudad emblemática de la Mayor de las Antillas, fue descubierta por Cristóbal Colón en 1494, en su segundo viaje. A su alrededor se instituyeron las ciudades de Santiago del Prado (hoy conocida como El Cobre) y Santiago de Cuba.
Por si no lo sabías, la región atesora la primera mina de cobre a cielo abierto de todo el continente americano, dato curioso para los cubanos.
Su bahía, que lleva el mismo nombre, resulta un profundo entrante, en una costa rectilínea y acantilada que deja un fino canal de comunicación con el mar.
Como parte de sus atractivos, se encuentra el Castillo de San Pedro de la Roca, declarado por la UNESCO, Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1997.
Por otro lado, a puerto santiaguero y provenientes de Haití entraron a Cuba, en 1524, los primeros 300 esclavos, congos, carabalíes y mandingas, que hoy después de un largo proceso, son segmento fundamental de la formación étnica y cultural del país.
Asimismo, el Santuario a la Virgen de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba, ubicado en la localidad El Cobre, constituye un lugar al que se le atribuye magia y poderes de todo tipo. Las personas acuden a él en busca de milagros y piedras que contienen el mineral de cobre, que según los entendidos en religión yoruba proporcionan amor y prosperidad económica a quienes las poseen.
En Santiago de Cuba está la Playa Daiquirí, inspiración del trago que lleva el mismo nombre, y que inicialmente se confeccionaba con Ron Bacardi, zumo de limón, azúcar y hielo triturado.
Por sus condiciones geográficas excepcionales fue la primera capital de Cuba hasta 1556, cuando se designa a San Cristóbal de La Habana como capital. Es una ciudad excepcional, en la que se combinan múltiples valores y atractivos que permiten al visitante entrar en contacto con la idiosincrasia de su gente, la cultura e historia del lugar; mientras disfruta de la naturaleza exótica.
Es la única Ciudad Héroe de Cuba, título concedido por el aporte de su pueblo a las gestas libertarias de los cubanos.